domingo, 30 de mayo de 2010

No fue.

No es el momento, no es el lugar, ni siquiera estoy seguro que seas tú. No es el tiempo, hasta puede ser que no sea en esta vida. Hoy guardo silencio y meto lo que creo y lo que siento en la maleta, entre unas poleras viejas y un par de sueños inconclusos. Por eso también me voy. No es que no quiera, es que necesito pensar y volver con un papel en blanco y botar este que tengo en la mano, roñoso y lleno de palabras ilegibles. Hasta luego, hasta siempre, hasta que el destino me de una tregua o más simple aún: hasta que lo imposible se vuelva todo lo contrario.

lunes, 24 de mayo de 2010

de la amistad y otros vicios.


"es así como una tarde de marzo yo hablaba con una compañera de vida habitual, de esas con la que una habla y conversa banalidades y le decía: "para mi la amistad es uno de los sentimiento universales más grandes, y es más, por eso NO tengo amigas. Porque a mis amigos yo los admiro, los quiero, los idolatro y además los entiendo, es decir, si tuvieran pechugas lo suficientemente apetecibles y fueran mujeres, obvio que me las intentaría agarrar". Ya, sigamos tomando. Sí, sigamos tomando mejor.

domingo, 16 de mayo de 2010

estela.


Juegos de palabras, juegos del corazón. Códigos y reglas inventadas por no sé quien y que limitan un encuentro que tiende a parecer algo grande, pero que en este momento y en este lugar, suena imposible. Porque tal vez no valga la pena hacer tanto daño y es mejor quedarse quietecito, calentito en este rincón húmedo ese ricnñon humedo lejano que tu y yo hemos inventado. El momento es ideal, porque no hay mejor momento que el ahora, pero nuestros tiempo no se combinaron. Decenas de películas y otros cientos de miles de libros y canciones hablan de estos encuentros imposibles y aún así, es curioso que siga pasando. Que hoy me pase a mi y a ti. A un nosotros que no existe. Y si es lo suficientemente grande tendrá que esperar y si no lo es, será sólo una raya en el agua que desapareció mientras pensabamos en otra cosa. El problema: yo no pienso en otra cosa.

domingo, 9 de mayo de 2010

obvio.

O acaso has escuchado a una pareja de enamorados que digan : “nos conocimos en un bar”.

domingo, 2 de mayo de 2010

ojos cerrados.

Soñar no cuesta nada. Nada. Es sólo cerrar los ojos y ponerse a pensar en todo lo que haríamos si tuviéramos el poder de hacerlo todo. Soñar no cuesta nada, lo que cuesta es dejar de soñar. Llegar un día y poner todas nuestras energías en una sola cosa: que los sueños dejen de ser sólo eso.