domingo, 20 de junio de 2010

Curado.

Hoy me miré la herida, y te cuento, ya está bien. No está infectada, cada día me molesta menos, yo diría que ya está cicatrizada. Te lo juro que en un momento pensé en que nunca iba a sanar, especialmente por la cantidad de sangre que salía como un chorro de crudo arrepentimiento. Ya esta cerrada, quiero que lo sepas. Si hasta tengo un par de heridas pequeñas que me molestan más, pero estoy contento, porque esta era LA grande, profunda y dolorosa, la que jamás pensé que sanaría. Ya no me cuesta caminar y no bebo para olvidar el malestar. Quiero que lo sepas, que lo pienses y que sigas tu vida. Quiero que te enteres por esta carta, y así aproveche también de enterarse la otra mitad de mi corazón.

miércoles, 16 de junio de 2010

sábado, 12 de junio de 2010

metro.

Despiertas en una ciudad que no es la tuya, pero al igualque en tu Santiago natal, te cuesta abrir los ojos. Te cuesta ver lo que has logrado, esta miopía te dificulta ver lo que has ganado y por suerte, tampoco ves lo que has perdido. Pero estás tal como hace un par de meses, apoyando tu mano derecha en un frío fierro de metro, esperando tu parada. ¿La diferencia? Hoy no esperas la estación para finalmetente llegar. Esperas ansioso, pero paciente, la estación en la que te toque empezar.